En este programa, debido a la conocida operación bikini, Samanta pasó 21 días ejercitando su cuerpo.
¿Qué provoca que deseemos desesperadamente obtener un cuerpo 10?, ¿a partir de qué
.. show full overview
En este programa, debido a la conocida operación bikini, Samanta pasó 21 días ejercitando su cuerpo.
¿Qué provoca que deseemos desesperadamente obtener un cuerpo 10?, ¿a partir de qué momento estar en forma se convierte en una obsesión? La periodista sigue durante tres semanas una cuidada y estricta dieta en la que se ha combinado ejercicio físico y nutrición, lo que le da grandes progresos en su estado físico. Samanta se somete a un chequeo médico justo antes de iniciar la experiencia y al finalizarla para comprobar su estado de salud.
El programa muestra cómo muchas personas llevan el culto al cuerpo al extremo, a límites que pueden resultar incluso peligrosos... La periodista recoge el testimonio de gente anónima y de personajes más populares que han hecho de los gimnasios un auténtico santuario y del ejercicio una religión.
Además del entrenador de las estrellas, Fernando Sartorius, Samanta está con personas que entienden el ejercicio como una forma de vida, jóvenes que prefieren no tener una vida social por entregarse en cuerpo y alma al gimnasio.
Conoce a Francisco Mula, un ex boxeador de 50 años, campeón del mundo y Mister Universo de culturismo, que sigue una curiosa dieta: su desayuno consiste en una tortilla de 14 claras de huevos y el resto de las comidas son 1 kilo y medio de pechugas de pollo y 750 gramos de arroz, además de un par de piezas de fruta y complejos vitamínicos.
La periodista está también con Martín Mazza, uno de los actores porno gays más importantes del mundo. Va al gimnasio dos veces al día y hasta tres veces al año se somete a ciclos de anabolizantes para mantenerse. Otro protagonista es Eric Putzbach, colaborador de televisión obsesionado con su propia imagen. Eric ya es un asiduo al quirófano y se ha sometido a múltiples operaciones de cirugía estética.
Durante estos 21 días, Samanta se acerca a casos reales de personas con clara devoción a su propio cuerpo, una devoción que pue