Antonio continúa sitiando a los vecinos de los interiores, que se las ven y se las desean para salir de casa. Para vigilar sus dominios necesita un portero, pero Coque le traicionó yéndose a Tuk-Tuk Rivas, y el mercado de porteros está fatal.
Antonio continúa sitiando a los vecinos de los interiores, que se las ven y se las desean para salir de casa. Para vigilar sus dominios necesita un portero, pero Coque le traicionó yéndose a Tuk-Tuk Rivas, y el mercado de porteros está fatal.