Ramón le pide matrimonio apenas la hija de Carlos Pedregal regresa de Suecia. A ocho meses de la muerte de Carlos Pedregal, Laura su hija, regresa a Chile.En el aeropuerto, Ramón Sarmiento la está esperando para llevarla a casa, luego de darle una bienvenida le pide matrimonio. Lo que él no sabe es que ella regresó comprometida con el Frente Patriótico Manuel Rodríguez.

A espaldas de Ramón, Laura comienza a involucrarse cada día más en el Frente, participando como correo entre militantes del grupo. El Frente realizó el secuestro de un coronel del Ejército, para lo cual lo mantienen oculto en una casa de seguridad. Laura vuelve a la Vicaría para visitar a sus ex compañeros de trabajo, en la oficina donde trabajaba su padre recuerda todos los momentos vividos junto a él, en este lugar una fotografía en blanco y negro recuerda al asesinado abogado. Andrea, continua en la cárcel por el caso que está investigando el Fiscal Militar, Ramón la visita para darle el apoyo de la Vicaría.

Finalmente el Coronel secuestrado es liberado por los frentistas. En el caso de la detención de la abogada de la Vicaría, luego de la solicitud que realizó Ramón se le concede la libertad bajo fianza. En la Vicaría realizan una recepción para recibir a la abogada luego de su liberación. Laura sigue cooperando con el Frente, ayuda a trasladar a uno de los miembros del Frente que esta herido. Los agentes de seguridad logran dar con el frentista capturándolo. Se le interroga para saber la identidad de los frentistas que lo ayudaron.

El joven abogado de la Vicaría, Javier se encuentra en la población La Victoria conversando con el cura Marchant, este sale del domicilio del sacerdote cuando se encuentra con una protesta de pobladores que está siendo reprimida por carabineros. Uno de los uniformados dispara hacia los pobladores. Javier es avisado por uno de los pobladores que han disparado a la casa del cura. Cuando Javier ingresa a la pieza del sacerdote lo ve que está en su escritorio inclinado sobre su Biblia, había fallecido. Laura visita una casa de seguridad del Frente, donde le señalan las labores que deberá cumplir, en ese lugar conoce a una joven frentista. El agente Alvarado interroga junto al Fiscal al frentista que había recibido el disparo para lograr dar con nombre de sus jefes en el Frente.

El juez Varela le exige al agente Alvarado asistir a un careo con el Rucio, un ex informante que trabajaba para Alvarado. En la Vicaría, Javier recibe el testimonio de un ex conscripto que debió ser guardia en el Estadio Chile, le relata a Javier lo que pudo observar en relación a la muerte del cantante Víctor Jara. Además Javier le solicita información sobre su padre que estuvo detenido en ese recinto. El ex conscripto observa una antigua filmación donde reconoce a uno de los autores del asesinato del cantante. El juez Varela logra que el agente Alvarado se presente al careo junto con el Rucio, pero el agente le grita al juez que no responderá ninguna pregunta ni tampoco realizará el careo con su ex informante. El juez decide realizar la encargatoria de reo de agentes culpables de los delitos que está investigando como el caso de la muerte de Carlos Pedregal.

El agente Alvarado reúne a un grupo de agentes, les señala que cumplirán una misión histórica para el país. Se dirigirán al Norte para cumplir una misión. En una playa del Norte del país un grupo de frentistas están transportando armamentos estos son sorprendidos por los agentes incoándose un enfrentamiento con los frentistas. Los agentes logran tomar las armas que estaban transportando los frentistas. Mientras se producía el enfrentamiento Manuel pudo escapar en un camión junto a la comandante, que va herida. El juez Varela interroga al rucio sobre un caso de derechos humanos ocurrido hace algunos años, sobre la detención de un grupo de militantes de izquierda.

Javier el joven abogado de la Vicaría comparte con un grupo de jóvenes que están participando de una protesta contra la dictadura. Uno de los jóvenes es un fotógrafo que está sacando foto de las protestas. Ramón acuerda con Laura una separación, ella se iría a vivir con su madre. Uno de los agentes de Alvarado, el Troglo, visita a Laura en su hogar, este la amenaza con un arma. Le pregunta por el paradero de Manuel, Laura le señala que no sabe nada de él, que está desaparecido. El agente deja a Laura amenazándola que encontrarán a Manuel Gallardo. Ella pacta un encuentro con Manuel para contarle que los agentes están en su búsqueda. El Juez Varela deberá cerrar el caso de los 13, caso que estaba investigando sobre la desaparición de trece opositores a la dictadura, en este caso el Juez esperaba procesar a los agentes de la dictadura. El juez Varela se enfrenta a sus superiores de la judicatura, el juez tiene la tesis que se deben investigar los crímenes de la dictadura pero luego aplicar la ley de Amnistía

Mónica va a dejar a Laura al aeropuerto. Pero ella nunca tomó el avión a Suecia, sino que fue recibida en una casa de seguridad del Frente, donde está Manuel y la comandante Alicia. En la Vicaría reciben un aviso escrito por el cual se les informa que por orden del Fiscal Militar Robles se procederá a requisar las fichas de la Vicaría. Por lo que el Vicario Sergio junto al resto de los funcionarios de la Vicaría se organizan para poner las fichas en cajas para luego trasladarlas del edificio. Luego de estar trabajando intensamente lograr poner las fichas en un sitio seguro. El Rucio se junta con un agente, este le entrega un pasaporte, se debe marchar a Paraguay donde podrá esconderse para no ser citado de nuevo por los tribunales. El agente visita a Marcelo Alvarado, le cuenta que necesita protección. Los frentistas arman una emboscada en la calle para asesinar al agente, Manuel participa del operativo junto a Laura, interceptan en la calle al agente, este es asesinado luego de un enfrentamiento con los frentistas.

Laura tiene la intención de conversar con Ramón para contarle su nueva noticia, pero encuentra una oposición de Ramón de reconsiderar la situación de ambos, él no le cree que no existe nada entre ella y Manuel. El agente Alvarado junto a su subalterno, Troglo llegan al restaurant del dueño que le había exigido la devolución de su dinero desde la financiera ilegal. El dueño del restaurant se alegro porque el agente Alvarado le contó que traía el dinero que le había solicitado. Cuando abre el bolso que le entrego Alvarado vio un bidón con bencina, le pidió aclarar que significaba eso. Alvarado le dispara respondiendo su pregunta. Luego roció el local con bencina y le prende fuego al restaurant. Ramón le da entender que no volverán, estaban conversando cuando escuchan un extra en la radio, en el Cajón del Maipo se había producido un enfrentamiento, habían atentado contra Pinochet.

Laura recibió un llamado a la puerta, se encuentra con un niño que le entrega una carta, le solicitan cuidar al niño. Ella concurre a la Vicaría donde se encuentra con Ramón, quien la recibe muy fríamente. Le señala que el niño que juega a la pelota en el patio está solo, pero que él sabe que su abuela vive en el norte, pero que no sabe nada de sus padres. Ramón le contesta que investigará el caso del menor. Mónica sigue investigando a la financiera ilegal que manejaba el agente Marcelo Alvarado, se reúne en la Vicaría con los abogados Andrea y Javier, les cuenta que fue asesinado un empresario dueño de un restaurant que era parte de la financiera ilegal. Los abogados de la Vicaría, Andrea y Javier se entrevistan con el Fiscal Robles, el Fiscal Militar que lleva todas las causas en las cuales están involucrados frentistas como la internación de armas y el atentado a Pinochet.

El Vicario Sergio realizó una misa con todos los funcionarios de la Vicaría, en sus oraciones nombra a todas las víctimas de la dictadura, como aquellos agentes que han fallecido por atentados. Nombra a Carlos Pedregal, funcionario de la Vicaría, su hija Laura, su esposa Mónica están presentes en la eucaristía. Está presente Ramón quién no está sentado junto a Laura. Son días duros para el Frente. El Agente Marcelo Alarcón ha logrado su objetivo, el Frente ha sido neutralizado. Un grupo de agentes de la dictadura allana distintas casas sorprendiendo a los frentistas. Los jóvenes frentistas son secuestrados, otros son asesinados por los agentes. Periodistas llegan al lugar donde mataron a uno de los frentistas, Alvarado en una conferencia de prensa les señala a los periodistas que el subversivo había fallecido en un enfrentamiento con los agentes. Manuel se encuentra en una casa de seguridad junto con otros frentistas, en la noche son rodeados por un grupo de agentes.

El agente Alvarado, interroga a Manuel, quién está herido, esposado, se burla de la situación de cautiverio del frentista. Alicia, la comandante del frente también está detenida en el cuartel. Laura le señala a Ramón que está iniciando trabajo de parto, la lleva a la clínica. Los agentes reúnen a los frentista, son llevados a una casa donde son dejados en distintas piezas. Los agentes pasaban pieza por pieza disparando a los frentistas. El agente Alarcón apunta a Manuel, al disparar, quitándole la vida al comandante Esteban. Salen al exterior, los agentes disparan hacia la casa. Alvarado enfrenta a su subalterno, el Troglo, le cuestiona su amistad con Estela. Los agentes siguen disparando a la casa, hasta que terminan sus cargas, la misión había concluido. La prensa se constituyó en la casa, el agente Alvarado les señaló que junto a sus agentes han sobrevivido a un enfrentamiento con los frentistas, sólo lamenta la muerte de uno de sus agentes. Ninguno de los frentistas sobrevivió. El agente Alarcón deberá presentarse ante tribunales, se está viendo una causa por estafa producto de la actividad de su financiera ilegal. Ramón y Laura se encuentran en la clínica, ella sostiene al hijo de ambos.