Marc vuelve a casa dispuesto a cambiar de vida, dejar el mundo de la noche y empezar de cero. Y eso es lo que Vicky necesita, que Marc sea un buen padre, un padre totalmente distinto al que tuvo ella. También Manuel intenta hacerlo bien ahora que no está Leo. Aunque no puede evitar pensar qué pasaría si ella volviera: si deberían recuperar su antigua vida o todo lo contrario: no volver .jamás a ser quienes fueron.